
Elena Pérez y Águeda Travado-Villalba del Alcor
En nuestra opinión, el Sevilla jugó muy bien la final de el Atlético de Madrid y otro del niño de Los Palacios, Jesús Navas, en el minuto noventa, yéndose de dos defensas y haciéndole un recorte al portero.
Durante el partido se produjo un enfrentamiento entre los dos equipos por la entrada de un jugador del atlético a Diego Capel, cuya falta no pitó el árbitro. El árbitro estaba a favor del atlético y expulsó a Dragutinovic, que estaba en el banquillo. Palop fue el que recogió la copa que le entregó el Príncipe Felipe. Antonio Álvarez motivó a la plantilla antes del partido, poniéndoles un vídeo del jugador fallecido, Antonio Puerta.
Fue una de las noches más emocionantes para la afición sevillista. También el entrenador y el portero sevillista, junto a toda la plantilla, le dedicaron la Copa del Rey a su compañero Antonio Puerta. Cuando el portero le entregó la copa al presidente sevillista, este le puso su sombrero, es decir, el sombrero de la suerte, a la copa.
Los jugadores sevillistas comentaron que los recuerdos de su compañero les dieron fuerzas para conseguir sus objetivos, ganar el partido y llevarse la Copa.
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